En PRAGA, que puedes hacer
1. Los imperdibles de Praga.
Mil años de historia te aguardan en el Castillo de Praga. Y más historia, en la imponente catedral gótica de San Vito, dominando el skyline de la ciudad.
2. Cerveza y más cerveza
En Praga podrás visitar más de 100 pubs, cada uno con su estilo y ambiente como el Golden Tiger en la calle Husova, con posiblemente las mejores cervezas y lagers del mundo como la Pilsner Urquell y U Flek en un ambiente acogedor y relajado. Praga invita a brindar.
3. Tiendas elegantes y cultura de cafés
Pasea por la Plaza Wenceslao, los “Campos Elíseos” de Europa Central, bordeada de tiendas exclusivas, restaurantes y cafeterías de todo tipo.
4. En la Plaza de la Vieja Ciudad
quedarás deslumbrado por sus edificios pintados con colores vivos, sus bonitas callejuelas y el fascinante Reloj Astronómico.
5. Descubre la Praga de los "happy few"
haz el tour de la Praga de Kafka, o admirar las piezas Art Nouveau que alberga el Museo Mucha, con obras de Alphonse Mucha, artista checo y figura clave de la Belle Époque parisina.
5 cosas a evitar
1. No pares ningún taxi en los alrededores de las Plaza Wenceslao
Muchos de ellos son ilegales y con precios que pueden resultar hasta cuatro veces más caros que un radio-taxi. Nuestra recomendación es que contactes a alguna compañía conocida como AA Radiotaxi en el +420 2 23311311 (hablan inglés).
2. Los carteristas atacan mayoritariamente por las plazas de la Vieja Ciudad y Wenceslao…
Con lo que estate alerta de tus pertenencias. No hagas caso a los que te ofrezcan “ayuda”, seguramente buscarán hacerse con tu cartera y/o móvil.
3. El alcohol es barato, pero evita los bares de turistas
Los bares y discotecas de Praga se cuentan por centenares, y la cerveza es muy barata. Los bares de las plazas de la Vieja Ciudad y de Wenceslao son a menudo aburridos y caros: hordas de turistas y servicio deficiente.
4. No te pases con la bebida
A los checos les gusta beber, pero saben controlar su consumo de cerveza así como comportarse en público. Con precios tan módicos quizás te sientas tentado a ir más allá, pero recuerda: ir bebido por Praga en zonas públicas no mola nada. Contrólate y evita cantar en todos los sentidos.
5. No compres la “Prague Card” si tu estancia es corta
Si simplemente haces una escapada a Praga (de menos de tres días, por ejemplo), resulta más económico comprar billetes sencillos en autobuses y tranvías y pagar por los museos y exposiciones que visites. La “Prague Card” no incluye descuentos a lugares como el Reloj Astronómico, el ayuntamiento o el barrio judío.
